Aunque todavía no hay estudios concluyentes, todo parece indicar que para evitar más afectaciones por la variante ómicron la vacuna de refuerzo será necesaria para toda la población

Estamos en diciembre y quiero aprovechar para hacer un llamado a nuestra población y a los que me están leyendo. Les pido que por favor reflexionemos acerca de la COVID-19 y lo que va a significar en nuestra vida y nuestro futuro.

Pese al miedo que a provocado a nivel mundial la nueva variante del virus que provoca la COVID-19, en algunos países de Centroamérica las autoridades parecen haber decretado que el virus ya no circula sin importar el riesgo que eso implica para sus habitantes

En la lucha contra las epidemias, es importante reconocer el momento y la oportunidad, para incidir de mejor manera, sobre el comportamiento de los casos, reducirlos y controlarlos.

Según los especialistas la presencia de la variante delta obliga que el 90 por ciento o más de la población esté vacunada para que pueda conseguir la inmunidad de rebaño y en Centroamérica todavía ningún país está cerca de lograrlo

La pandemia de COVID-19 colocó en la primera página de los medios de comunicación a la epidemiología, la salud pública, los mecanismos de transmisión y las medidas de prevención para cortar el contagio; también, entre otros temas, la importancia de la participación consciente de la población para prevenir y controlar los problemas de salud.

La Educación para la Salud dota a los individuos y comunidades de herramientas para tomar decisiones informadas respecto a su salud y ese aporte le dieron años a los nicaragüense los doctores Roberto Calderón, Juan Ignacio Gutiérrez y Gilberto Martínez.

Las brechas que existen entre los distintos grupos de la sociedad dejan sin las oportunidades a los más desposeídos

Debido a la reducida cobertura de la vacunación y a la falta de medidas de prevención, el virus que provoca la COVID-19 sigue propagándose

Para que una sociedad pueda desarrollarse es primordial que se respeten los derechos humanos; y el incumplimiento en la aplicación de estos, conlleva al atraso del logro de la salud individual y colectiva.

Hasta ahora no hay estudios científicos al respecto, pero el testimonio de mujeres en Estados Unidos y otros países evidencian que en algunos casos las vacunas contra la covid-19 provocan reacciones adversas en el ciclo menstrual