Costa Rica admitida a la OCDE, el club de los países desarrollados»
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Lucydalia Baca Castellón
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Los ajustes realizados en los últimos años para lograr el ingreso a la OCDE, fortalecieron la institucionalidad del país para beneficio de los ciudadanos
En medio de la peor crisis económica que ha enfrentado el mundo en los últimos 100 años y la semiparalización global provoca por la pandemia de la Covid-19, Costa Rica despejó el camino para convertirse en el miembro número 38 del selecto grupo de países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). El equivalente al club de países desarrollados.
El aval recibido pone fin a cinco años de trabajo, que incluyeron diversos ajustes. También la aprobación de catorce leyes y otros cambios estructurales que transformarán la vida de los costarricenses en el mediano y largo plazo. Y a un proceso que inició oficialmente en mayo de 2012 cuando Costa Rica expresó oficialmente su deseo de ingresar a la OCDE.
La OCDE se describe como una organización internacional que trabaja para desarrollar políticas para una vida mejor. Cuyo objetivo es dar forma a políticas que fomenten la prosperidad, la igualdad, las oportunidades y el bienestar para todos.
“Trabajamos junto con gobiernos, formuladores de políticas y ciudadanos, para establecer estándares internacionales basados en evidencia y encontrar soluciones a una variedad de desafíos sociales, económicos y ambientales”, se puede leer en su sitio web.
Proporcionan conocimiento
Estos desafíos incluyen “desde la mejora del desempeño económico y la creación de empleos. Hasta el fomento de una educación sólida y la lucha contra la evasión fiscal internacional”, explica el organismo.
Y añade que proporcionan el conocimiento que los países miembros y una variedad de socios pueden usar cuando toman decisiones. Además, escanean y anticipan el cambio económico, ambiental y social, y proporcionan revisiones específicas de cada país a solicitud de los gobiernos.
El organismo fue fundado en 1961 y tiene su sede en Francia. A partir de ahora Costa Rica inicia otro proceso. Este contempla que en las próximas semanas el presidente, Carlos Alvarado y el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, firmen el Acuerdo de Adhesión. Una vez suscrito, deberá ser ratificado por la Asamblea Legislativa; y posteriormente depositado ante las autoridades francesas.
Una vez completado el proceso, Costa Rica se convertirá en el primer país centroamericano de integrar el organismo. Y en el cuarto de América Latina, junto a México, Chile y Colombia, en ser parte del llamado club de los países ricos.
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Un hito en la historia de Costa Rica
También son parte de ese grupo Alemania, Canadá, Dinamarca, Israel, Italia, Japón, Corea del Sur, Holanda, Noruega, Estados Unidos, España, Suecia, Suiza, Turquía y Reino Unido, entre otros.
“El ingreso del país a la OCDE representa un hito en la historia de Costa Rica. Hoy celebramos que podemos demostrarle al mundo que nuestro país está comprometido con los más altos y exigentes estándares internacionales, que podemos trabajar juntos para transformar a nuestro país y que podemos inspirar a otras naciones a aprender de nuestra experiencia y buenas prácticas”,
Carlos Alvarado, presidente de Costa Rica
Según Dyalá Jiménez Figueres, ministra de Comercio Exterior (Comex) y coordinadora del proceso de adhesión, el ingreso a la organización es el resultado del “trabajo perseverante de un equipo interinstitucional. En el que participaron más de cuarenta ministerios e instituciones. Y donde el apoyo y aportes del sector privado y de la sociedad civil han sido fundamentales”.
Según Jiménez todos los ajustes realizados en los últimos años para lograr el ingreso a la OCDE, fortalecieron la institucionalidad del país para beneficio de los ciudadanos.
Tras los estándares que lo lleven al desarrollo
Para Anabel González, ex-ministra de Comercio Exterior, que inició hace cinco años el proceso que ahora le permite a Costa Rica adherirse a la OCDE, considera que haber pasado por ese proceso de incorporación ahora le permite al país tener una visión compartida acerca de la importancia de buscar estándares altos que lo impulsen hacia el proceso de desarrollo.
Además, el trámite propició el fortalecimiento de la capacidad institucional y la adopción de valiosas reformas en competencia, servicios financieros y otras áreas.
“El beneficio más importante para Costa Rica de ser parte de la OCDE es poder contar con una plataforma que nos impulse en nuestro camino al desarrollo. La OCDE nos puede ayudar a alcanzar estándares más altos, a adoptar mejores políticas públicas y a trabajar de una manera más organizada y articulada, con la mejora de la calidad de vida de las personas como eje central”.
Anabel González, ex-ministra de Comercio Exterior en declaraciones a La Nación
Según la ex-ministra el ingreso a la OCDE es solo el punto de partida. Por lo que será necesario preparar una estrategia de aprovechamiento de esa plataforma de conocimiento y experiencia.
Es como tener un sello de garantía
Para la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), pertenecer a la OCDE “es un gran avance”. Porque es como recibir un sello de garantía en términos de calidad institucional y desarrollo económico.
“En términos de beneficios ser parte de la OCDE constituye un referente muy significativo ante los inversionistas internacionales. Porque implica que el país respeta una serie de compromisos legales, acuerdos y estándares internacionales. Referidos, entre otros temas a libertad de mercado, transparencia e información. Y esto los hace más atractivos ante los inversionistas”, dice un análisis de Funides.
Sin ser ricos van hacia el desarrollo
Según la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), otro beneficio de pertenecer al llamado club de los países ricos, es que se tiene acceso a una red de conocimiento. Y a diseñar y compartir información fundamental para la elaboración de políticas económicas, tecnológicas, educativas y de otras áreas que facilitan la solución de problemas. “Costa Rica es el cuarto país de América Latina que ingresa a la OCDE. Antes lo hicieron México, Chile y Colombia. Eso significa que ciertos países de la región, aunque no son países ricos, se están graduando en su camino hacia el desarrollo económico. Después de muchos cambios han logrado mejorar muchos indicadores económicos y eso les ha valido su ingreso a dicha organización”, dice Funides.
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