¿En realidad es más severa la variante delta del SARS-CoV-2?

El surgimiento y dominancia de la variante delta del SARS-CoV-2 en el mundo, ha despertado nuevos temores en la población de nuestros países. Especialmente en el sector salud, donde una nueva ola ascendente de nuevos casos amenaza con romper a los sistemas de salud. Pero ¿realmente la delta es más virulenta que el resto de las variantes del coronavirus? Hemos examinado, tres fuentes principales para tratar de dilucidar esa evidencia. Una fuente la constituyen las opiniones de especialistas médicos internacionales; otra son los estudios publicados al respecto; y por último lo que nos dicen las estadísticas que estamos observando en el mundo.

Opiniones de especialistas sobre la variante delta

Aunque día con día salta a la vista nueva evidencia, al revisar las opiniones de profesionales del campo médico se observa cierta coincidencia en cuanto a la mayor o menor gravedad de la COVID-19 producida por la variante delta. Algunos como el doctor Aaron Ritcherman de la universidad de Pennsylvania opinan que si realmente existe una diferencia entre la variante delta y las otras, esta es bastante leve.

En términos similares se expresa la doctora Jennifer Nuzzo de la universidad John Hopkins, que dice que los riesgos de personas vacunadas no han cambiado en realidad; igualmente opina el doctor David Dowdy de la misma universidad.

Estudios científicos

La evidencia resultante de un número limitado de estudios no es concluyente. Un estudio escoces publicado recientemente, concluyó que los pacientes contagiados con la variante delta presentan cuadros clínicos más severos que los contagiados con la cepa original. Sin embargo, otros estudios contradicen dichos resultados; ya que no encontramos una mayor diferencia entre severidad de casos clínicos entre contagiados por delta y contagiados por otras variantes

El autor también escribió: ¿Nos debe preocupar la variante mu y su ritmo de cumbia?»

Los números de la COVID-19

Pero lo que solidifica las dudas acerca del aumento de virulencia de esta variante delta es la información epidemiológica reportada por los diferentes países. A nivel mundial, la tasa de mortalidad ha venido disminuyendo progresivamente; esta reducción se ha registrado a pesar de que los números de casos nuevos se encuentran al alza.

En Estados Unidos donde esta última ola de nuevos casos ha registrado un incremento de 15 veces desde la meseta de junio del 2021, la tasa de hospitalización aumenta únicamente en seis veces y la tasa de mortalidad continúa descendiendo.

"La mayoría de los países no reportan una correlación entre el número de nuevos casos y las tasas de hospitalización y/o muertes. Esta falta de correlación entre casos y hospitalizaciones nos inclina a pensar que la nueva variante delta no es substancialmente más virulenta que el resto de las variantes. ¿Pero cómo nos afecta esta información en nuestra vida diaria?

"Es muy comprensible que este constante y a veces contradictorio flujo de información, muchas veces incluso nos paralice. No ha sido fácil para nadie navegar este río de información. Especialmente cuando interpretamos y trasladamos esta información al ciudadano; que también es bombardeado por información maliciosa producida y muy bien gestionada por grupos ideológicos y religiosos, que tratan de herir mortalmente a la comunidad científica".

Alfonso Rosales, médico epidemiólogo

No ha sido sencillo navegar en esta pandemia, cuando incluso algunos gobiernos también manipulan la información con fines políticos. Por ello es necesario, que nuestro sector salud sea lo más transparente y humilde en el manejo de la información con respecto al coronavirus. Además, debe aceptar sus limitaciones y actuar de acuerdo con ellas.

Otro escrito de este autor: Aplicar tercera dosis a unos, es dejar sin ninguna vacuna a otros»

Conclusiones sobre la variante delta

Entonces, lo que al momento y con la información disponible podemos decir respecto a la variante delta es lo siguiente:

• Para la población infantil y adultos menores de 65 años y vacunados: ninguna de las variantes actuales impone un riesgo de hospitalización y muerte mayor que otros riesgos asociados con la vida diaria, por ejemplo accidentes vehiculares.
• Para personas con factores de riesgo, como obesidad severa o con trasplante de órgano o con cáncer: los riesgos de hospitalización y muerte si son mayores al contagiarse de COVID-19, pero independiente de la variante.
• Se ha observado un riesgo aumentado de hospitalización y muerte para adultos mayores de 65 años y vacunados con la última ola, aunque esto no parece estas asociado a la variante delta.

En lo personal mi máxima es: "el riesgo es lo suficientemente bajo para vivir la vida y lo suficientemente alto para tener cuidado".

*El autor es médico epidemiólogo, salvadoreño radicado en Estados Unidos