Países deben firmar un tratado para prevenir y enfrentar las pandemias»
Alfonso Rosales
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La inequidad y la falta de solidaridad entre los países que ha dejado en evidencia el manejo de la pandemia, obliga a los países a firmar un tratad que le otorgue poderes ejecutivos a la OMS
“He llorado al ver pasar entierros a cualquier hora del día y la noche frente a mi casa. A veces solo un vehículo atrás del féretro y en muchas ocasiones sin una flor. A veces despacio como no queriendo llegar al cementerio y en ocasiones rápido, pero siempre el mismo dolor. Mi Nicaragua, mi Estelí cómo dueles”. Así se expresaba un ciudadano nicaragüense ante la descomunal ola de infecciones por COVID-19 que actualmente afecta a nuestro hermano país.
Sin embargo, el gobierno de Nicaragua desde hace más de seis meses únicamente reporta una muerte por semana. Así es señores, de acuerdo con los datos reportados por su gobierno, Nicaragua es el país con el menor número de casos y muertes de toda Latinoamérica.
Pero el mundo entero sabe con entera certeza, que esos datos son una burda y cruel distorsión de la realidad nicaragüense, pero todos callamos. Las agencias multilaterales callan, las agencias bilaterales callan, el Sistema de Integración Centroamericano (SICA) calla, los Organismos no Gubernamentales (ONG) internacionales (ONG) también callan.
Siempre he criticado la inequidad que existe en nuestro planeta, evidenciada por la falta de equidad en la distribución de las vacunas. Pero esto que esta pasando en Nicaragua ante nuestros ojos y que nos quedemos callados, no tienen nombre señores. Que los países y sus gobiernos manipulen sus datos oficiales sobre la pandemia del coronavirus, no solo es un atentado contra la seguridad física de sus ciudadanos, también es un atentado contra los países vecinos.
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Respuesta ante la pandemia evidencia limitaciones
El mundo necesita y se merece, una restructuración profunda de las agencias multilaterales que tienen como mandato la seguridad de los países. Los Gobiernos en periodos de emergencia sanitaria mundial, tienen que responder legal y humanitariamente a las necesidades de sus poblaciones internas y externas.
La respuesta a la pandemia de COVID-19 ha puesto de manifiesto las graves limitaciones de la Normativa Sanitaria Internacional (IHR por su sigla en inglés) y de las capacidades institucionales de los organismos multilaterales. Un panel internacional independiente ha señalado algunas de las debilidades que actualmente sufre la IHR, entre sus debilidades ha señalado:
- La incapacidad de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para verificar de forma independiente los informes estatales.
- Débiles mecanismos de cumplimiento de la OMS para hacer cumplir las obligaciones de la IHR y sus propias recomendaciones.
- La falta de poder de la OMS para monitorear, investigar y remediar las acciones perjudiciales.
- Insuficiente transparencia e intercambio internacional de datos científicos.
- Falta de cooperación mundial, especialmente en la asignación equitativa de vacunas y otros recursos médicos.
El 30 de marzo de 2021, los jefes de Estado de 26 países junto al director ejecutivo de la OMS Tedros Adhanom Ghebreyesus y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, pidieron un tratado internacional sobre preparación y prevención de pandemias.
El autor también escribió: ¿En realidad es más severa la variante delta del SARS-CoV-2?»
Un tratado que otorgue poderes a la OMS
Este nuevo tratado está en desarrollo y otorgaría poderes ejecutivos a la OMS. Esto permitiría entre otras cosas, que a través de mecanismos de control, inspección y cumplimiento, se asegure que los países cumplan con las normas fundamentales de contención. También le facilitaría:
- Verificar de forma independiente los informes estatales.
- Publicar datos cruciales sobre los brotes sin la confirmación de los Estados.
- Investigar nuevos brotes de enfermedades infecciosas.
- Instituir medidas correctivas.
- Otras áreas para la prevención de pandemias estarían relacionadas con enfermedades zoonóticas, fortalecimiento de sistemas de salud; y equidad doméstica e internacional en el acceso a medicamentos y vacunas.
"La pandemia que actualmente sufrimos es un evento sanitario de grandes magnitudes que ataca a todos los países por igual; sin embargo, ha resaltado prominentemente la ausencia de solidaridad entre países. Todas las naciones ricas, con tradición bilateral como Estados Unidos y los países europeos, se preocupan primeramente en satisfacer sus necesidades internas; y luego si sobra, compartir con sus aliados".
Alfonso Rosales, médico epidemiólog
Otras naciones, ya sea porque poseen sistemas de vigilancia sanitaria débiles; o porque manipulan las datos por razones políticas, han sufrido de graves vacíos de información, así lo han demostrado los países de Centroamérica. Entonces, no es de extrañarse que algunos lideres centroamericanos ahora estén hablando de la "obsolescencia" del sistema de Naciones Unidas; y aprovechan para anunciar que su país "irá por un nuevo camino, el camino hacia el desarrollo". Mas pareciera que lo que molesta es tener que rendir cuentas.
*El autor es médico epidemiólogo, salvadoreño radicado en Estados Unidos
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